ICONOS DE LOS DIBUJOS ANIMADOS. PUESTO 9

En los crudos tiempos de la segunda guerra mundial, la Warner Bros comenzó a generar una serie de personajes destinados a competir con Disney por la atención del espectador. De la fábrica californiana surgieron personajes tan famosos como Bugs Bunny o el Pato Lucas. Sin embargo soy un fan de un personaje menor y menos conocido por el gran público. 

9 EL GALLO CLAUDIO

Los personajes de Warner eran y son la perfecta encarnación del antihéroe. Ninguno, ni Bugs Bunny, ni Lucas, ni Piolín, ni Claudio son buenos y nobles de corazón. De hecho todo lo contrario. Básicamente, la diferenciación entre buenos y malos propuesta por este estudio, conlleva que los malos desencadenan la reacción de los buenos al poner en peligro la integridad física de éstos. Sin embargo son los supuestos héroes los que acaban destrozando la salud de sus némesis en situaciones ridículas e hilarantes. De tal manera, cuando Yosemite Sam persigue al conejo más famoso de la televisión con su escopeta de dos cañones, lo que suele suceder es que el ávido cazador acabe con su rostro tiznado de hollín y pólvora en varias escenas. Otro ejemplo es el de Lucas, convertido de villano a héroe por su condición de metepatas definitivo. Lucas es pura maldad, pero sin embargo una maldad guiada y compenetrada con una estupidez más allá de toda duda. Piolín, tan dulce y cándido, no duda en hacer la mayor de las perrerías a su perseguidor y lindo Silvestre. Como último ejemplo, el Correcaminos guió a más de una generación a la conclusión de que en esta vida vale más ser rápido que inteligente, y para muestra el continuo botón de Willy Coyote, posible doctor por el MIT, con conocimientos de física e ingeniería dignos del mismísimo Sheldon Cooper, pero destinado al fracaso más abrasador y lamentable.

Bugs es la viva imagen del delirio anfetamínico

Sin embargo Claudio es mi favorito por varias razones. La primera es que es el vivo reflejo del hedonista absoluto. Como su contrapartida animal real, la vida de Claudio consiste en estar rodeado de gallinitas y en tocarse la pera. En muchos momentos se nos muestra al gallo tumbado a la bartola rodeado de mujeres. Su tiempo lo disfruta como puede y entre sus hobbies destaca escapar del gavilán que merodea la granja y sobretodo apalear en el trasero al perro guardián que vive con él.

Visto así, queda un poco sádico

Habitualmente las tramas consisten en que Claudio se levanta, se acerca a la caseta del perro, lo apalea y éste le persigue. Extrañamente y tras el paso de los años, dicho perro mantiene la costumbre de dejar una estaca en la puerta de su caseta y dormir con el culete en pompa, lo cual es toda una incitación a la acción para el noble Claudio. Otra característica del gallo es su forma de hablar, con un marcado acento sureño en el original inglés y con una tendencia a repetir frases que den rienda suelta a mostrar la prepotencia con la que Claudio se mueve por su granja.

Acento sureño y prepotencia, ¿a quién me suena?

Quizá no sea el más grande de los personajes de la Warner, que tiene muchos, pero es que cada vez que veo como Claudio coge a su amigo por el rabo y le da cuatro estacazos (con el consiguiente efecto de sonido), no puedo parar de reírme. Humor inglés, que se llama.