En algún momento hay que decir, ¡ya basta! Lo de hoy ha sido una declaración de intenciones de los jugadores a los que en algunos medios se les acusó de hacer la cama a Preciado en Villarreal y San Sebastián. Estos jugadores no están preparados para hacer la cama a nadie salvo a ellos mismos, y hoy lo han demostrado sobradamente. La actitud tan deplorable mostrada, no puede quedar sin castigo. Una vez más, estos señores a los que la crisis no afecta, estos privilegiados que trabajan en lo que quieren, estos "magos del balón", estos jugadores rojiblancos que han arrastrado el escudo por el campo otro día más, con su indolencia han causado otra decepción más a una afición que los ha apoyado contra viento y marea.
Se me hace imposible entender la actitud colectiva del equipo, desde el banquillo al campo. Ya que el momento de mirar al palco ya pasó hace muchos años y ahora mismo el régimen instaurado parece inamovible e intocable, echemos un vistazo a lo que vemos en el terreno de juego.
Juan Pablo cumple como puede ante las acometidas rivales que habitualmente se plantan en su área pequeña en dos toques. El portero rojiblanco tiene notables limitaciones con el balón en los pies y a la hora de salir de su arco, pero no es el mayor culpable de lo que sucede y de hecho sus actuaciones evitan ridículos mayores.
La defensa, si nos atenemos a este partido y a muchos otros, es una lacra total. Lejos quedan los tiempos en los que Lora, Canella y Botía eran carne de selección e incluso algunos tomaban a Gregory como una resurrección de Desailly o Thuram. Nada más lejos de la realidad, la cruda realidad. Lora es un agujero negro y su suplente también. Botía fue un día a comer pipas a la grada mientras jugaba la roja y desde entonces no ha sido ni su sombra. Gregory es un central de segunda y para de contar, y mientras tanto la gran esperanza rojiblanca, Canella, tendrá suerte si el año que viene encuentra acomodo en un club de la parte medio baja de la tabla española. En conjunto, además, hoy mostraron una actitud lamentable. Como apagué el ordenador tras el segundo gol, no vi la vergüenza final, pero me quedo con una cosa. Remate de Tino Costa, paradón de Juan Pablo y rechace que cae... a Tino Costa, mientras Lora y demás se quedan muertos. Centro del che y Botía no sabe si va o viene, así que la deja pasar para que el hermano Aduriz la mande al limbo. De verdad, bochornoso.
En el medio, ni, trivote, ni pivote, ni rollos. Sin físico no hay medio, y sin técnica tampoco. Rivera se muere corriendo y luego no es capaz de dar un pase a dos metros o de escoger la opción más sencilla. En el mundo al revés, Eguren mete dos o tres pases en profundidad decentes mientras se olvida de defender en la frontal en el primer gol de los valencianos. André corre y corre, a ver si encuentra a Nacho, pero Cases no está y tampoco este año es el del canterano. Carmelo y de las Cuevas, calidad y dejadez, persiguen a su par durante dos metros para cubrir expediente y luego se van. Ni están ni se les espera. Los dos jugadores con más clase del Sporting se olvidan de que hay que construir, pero es que además, la sensación es que la táctica es la de pasádsela a Will, solo que aquí todos se creen el Príncipe de Bel air, y de esta manera, cada uno puede hacerse una jugada individual por partido mientras los demás miran desde lejos.
Arriba Barral, agotada su magia que le permitió llegar a los siete goles, pega coletazos de vez en cuando, pero ni presión, ni interés. Pasea por el campo consciente de que su compañero más cercano se encuentra a veinte metros. Colunga, llegado para salvar la nave, sale en medio del naufragio para ahogarse con los demás, con la esperanza de que el banquillo de Getafe esté huérfano de Luis García el año que viene.
Luego están los muertos vivientes, Ricardo, Ayoze (compra botas de tacos, Ayoze, esto no es sala y te caes, normal), Sangoy (¿de verdad no es mejor que lo que hay?), Damián, Novo, Trejo, Bilic y compañía, gente que ni está, ni se le espera.
Está claro que la deriva está cerca y en breves tiempos será una realidad. Llegado ese momento habrá que pensar que se queda y quién viene ¿Es suficiente que Muñiz, Barrera, Guerrero, Mendy y Menéndez suban al primer equipo? Mi sensación es que no. El problema no serán los que suban, sino los que se queden. El año está siendo muy duro y el que viene pinta peor. Lo siento pero doy al equipo por muerto. Y creo que no soy el único.
Se me hace imposible entender la actitud colectiva del equipo, desde el banquillo al campo. Ya que el momento de mirar al palco ya pasó hace muchos años y ahora mismo el régimen instaurado parece inamovible e intocable, echemos un vistazo a lo que vemos en el terreno de juego.
Juan Pablo cumple como puede ante las acometidas rivales que habitualmente se plantan en su área pequeña en dos toques. El portero rojiblanco tiene notables limitaciones con el balón en los pies y a la hora de salir de su arco, pero no es el mayor culpable de lo que sucede y de hecho sus actuaciones evitan ridículos mayores.
La defensa, si nos atenemos a este partido y a muchos otros, es una lacra total. Lejos quedan los tiempos en los que Lora, Canella y Botía eran carne de selección e incluso algunos tomaban a Gregory como una resurrección de Desailly o Thuram. Nada más lejos de la realidad, la cruda realidad. Lora es un agujero negro y su suplente también. Botía fue un día a comer pipas a la grada mientras jugaba la roja y desde entonces no ha sido ni su sombra. Gregory es un central de segunda y para de contar, y mientras tanto la gran esperanza rojiblanca, Canella, tendrá suerte si el año que viene encuentra acomodo en un club de la parte medio baja de la tabla española. En conjunto, además, hoy mostraron una actitud lamentable. Como apagué el ordenador tras el segundo gol, no vi la vergüenza final, pero me quedo con una cosa. Remate de Tino Costa, paradón de Juan Pablo y rechace que cae... a Tino Costa, mientras Lora y demás se quedan muertos. Centro del che y Botía no sabe si va o viene, así que la deja pasar para que el hermano Aduriz la mande al limbo. De verdad, bochornoso.
En el medio, ni, trivote, ni pivote, ni rollos. Sin físico no hay medio, y sin técnica tampoco. Rivera se muere corriendo y luego no es capaz de dar un pase a dos metros o de escoger la opción más sencilla. En el mundo al revés, Eguren mete dos o tres pases en profundidad decentes mientras se olvida de defender en la frontal en el primer gol de los valencianos. André corre y corre, a ver si encuentra a Nacho, pero Cases no está y tampoco este año es el del canterano. Carmelo y de las Cuevas, calidad y dejadez, persiguen a su par durante dos metros para cubrir expediente y luego se van. Ni están ni se les espera. Los dos jugadores con más clase del Sporting se olvidan de que hay que construir, pero es que además, la sensación es que la táctica es la de pasádsela a Will, solo que aquí todos se creen el Príncipe de Bel air, y de esta manera, cada uno puede hacerse una jugada individual por partido mientras los demás miran desde lejos.
Arriba Barral, agotada su magia que le permitió llegar a los siete goles, pega coletazos de vez en cuando, pero ni presión, ni interés. Pasea por el campo consciente de que su compañero más cercano se encuentra a veinte metros. Colunga, llegado para salvar la nave, sale en medio del naufragio para ahogarse con los demás, con la esperanza de que el banquillo de Getafe esté huérfano de Luis García el año que viene.
Luego están los muertos vivientes, Ricardo, Ayoze (compra botas de tacos, Ayoze, esto no es sala y te caes, normal), Sangoy (¿de verdad no es mejor que lo que hay?), Damián, Novo, Trejo, Bilic y compañía, gente que ni está, ni se le espera.
Está claro que la deriva está cerca y en breves tiempos será una realidad. Llegado ese momento habrá que pensar que se queda y quién viene ¿Es suficiente que Muñiz, Barrera, Guerrero, Mendy y Menéndez suban al primer equipo? Mi sensación es que no. El problema no serán los que suban, sino los que se queden. El año está siendo muy duro y el que viene pinta peor. Lo siento pero doy al equipo por muerto. Y creo que no soy el único.
Te doy la razon, el pasotismo de los jugadores raya lo indecente! Yo viendo otros partidos de primera veo como se juegan la cara y lo que haga falta y vaciandose a tope, yo tambien veo a los jugadores que ya bajaron los brazos, es increíble lo que nos pasa! Ahora comentan que viene Clemente y que se va el floreru!! Esto parece una película de cachondeo!
ResponderEliminarParece mentira que no se den cuenta que se juegan su futuro ¿Dónde va a ir Carmelo? ¿O André? ¿O Barral? Cualquiera que los vea dirá que son unos paquetes. Pues mira, que venga Clemente, por lo menos sabes que el que no se meta en el partido, va pal banquillo rápidamente.
Eliminarchapó al articulo
ResponderEliminarGracias. Será por estar escrito desde el enfado absoluto. Un saludo
EliminarAl final, como vaticiné, Clemente al Sporting. Esperemos que resucite algo de su viejo toque, porque en Murcia no tienen especial buen recuerdo de él.
ResponderEliminarVeremos que pasa, a peor no pude irse. Tengo ganas de ver al de Barakaldo poniendo firme a más de uno.
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