sábado, 12 de octubre de 2013

ESOS VILLANOS DE MARVEL... QUE NO LE IMPORTAN A NADIE



 
Existen miles de villanos en el mundo del comic (y en el mundo en general). Ese reverso tenebroso que permite al héroe dar el do de pecho y mostrar cualidades que le hacen destacar sobre el ciudadano medio. Sin embargo, como en todo en la vida, hay villanos de primera, de segunda y de tercera.

El Anillador
Y luego están los de cuarta.

Armadillo
Se les considera supervillanos, puede que por sus vistosos disfraces o por tener una idea que les pone un paso por delante de un simple matón. No lo sé, pero son personajes que no destacan ni para lo malo. Anodinos, aburridos, inocentes, sin futuro ni pasado, pero ¿A quién no le gusta un buen perdedor?

La liga de los perdedores (estos eran buenos)
La historia de Marvel está plagada de caídos y ridículos personajes sin más pasión que ser derrotados una y otra vez. Aún así, han tenido sus momentos. Por poner algunos ejemplos voy a tirar de memoria.

El Trampero, también conocido como “Pete pote de pasta” es un villano sin más que ofrecer que unos cartuchos de algo semejante a pegamento o aceite o, como dice su apodo, pasta. Sin ninguna capacidad para nada en la vida, Pete Petruski, nombre y apellidos estilo clásico Marvel, logró derrotar a Spider-man limpiamente. Otros de mayor envergadura no han sido capaces. Sin embargo la victoria efímera sirvió para poco en la lenta carrera del Trampero que nunca ha saltado a la primera división de villanos.

Otro ejemplo es el Zancudo, personaje con piernas extensibles y metálicas. En lugar de volar, Wilbur Day eligió ser alto, que no gigante. De esta manera, Day se vanagloriaba de robar en los pisos más altos de los rascacielos, cosa sencilla en el Universo Marvel donde hasta la Tía May se sube a un tejado como quien lava. Vemos que el Zancudo es original como idea, pero inútil en el mundo práctico. Aún así, logró derrotar a Spider-man, clásico perdedor (y por ello más grande como héroe) o Goliath. Sin embargo sus paseos por Nueva York acabaron al encontrarse cara a cara con el Punisher. Todos sabemos que Frank Castle no tolera las chorradas y eso de andar delinquiendo en zancos, pues me van a perdonar, no tiene mucho sentido.

Mimi Aulladora, o como se le conoce ahora Pajaro Cantor, uno de los grandes líderes de los Thunderbolts empezó como una cutre villana compañera de otro cutre villano como Angar. Los guionistas trabajaron en serio y su capacidad para crear sonido sólido, algo que a Klaw le reportó grandes beneficios, la hicieron resurgir, esta vez del lado del bien.

Pero hay muchos más. Zancudo y Trampero son ejemplos de malos villanos pero al menos han dado alguna alegría a sus seguidores. Los hay peores, mucho peores, por ejemplo:

Manfred Haller, el Hombre elefante, que diseñó un traje paquidérmico para derrotar a la salvaje Hulka fracasando vilmente. Si es que cuando usas unos colmillos como nunchakus, no puede pasar nada bueno.

Alexander Gentry, el Puercoespín original. Todos sabemos que Marvel utiliza muchos elementos de la vida salvaje para crear sus personajes, pero al igual que otros muchos animales, el puercoespín no es un buen modelo. Un diseñador de armas embutido en un traje con pinchos. Poco bagaje para un enemigo que es saco de los golpes para la Avispa o el Capitán América.

Maxwell Markham, Grizzly. Un tipo grande, se viste de oso y a vivir la vida. Que yo recuerde el traje ni era acorazado ni nada, simplemente una bola de pelo, supongo que para el duro invierno neoyorquino.

Michael Marko, también conocido como “El hombre montaña Marko”, nombre muy molón, si se me permite la opinión, para un personaje que, en el único comic que he leído suyo, es un adicto a levantar pesas y tomar esteroides. Una versión pretérita del “Pain and Gain” de Michael Bay.

Y voy a cerrar ya, porque podría estar eternamente, con un último ejemplo, no solo de villano cutre, sino de una mal entendida rivalidad Marvel/DC. Marvel posee un fondo de armario extensísimo, posiblemente mayor que el de DC, pero aquí viene el problema y es que los más famosos villanos (Lex Luthor o el Joker) son propiedad ajena a la casa de las ideas. De esta manera, Marvel ha intentado tomar prestadas ideas externas creando a su propio Espantapájaros o al Bufón y ninguno ha triunfado. No iba a ser menos Lorina Dodson, Coneja Blanca, amante de los libros de Lewis Carroll y atracadora de segunda fila  con poco futuro en el mundo Marvel donde cualquier investigador con un doctorado en bioquímica y biología molecular es capaz de conseguir poderes superhumanos con el mínimo error experimental.
Así investigo yo
 Puñetera envida que me da, será por errores en el laboratorio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...