Ayer se me mostraron dos opciones. La primera era ver al Sporting y sufrir
como un perro. La segunda era ver una película del horrendo Paul W.S. Anderson. Lancé una moneda al
aire y salió canto. Así que sufrí con la horrorosa primera parte del club
gijonés y luego con la horrorosa visión de lo que debe ser una película de
romanos según el marido de Milla Jovovich.
Porque la película es mala de narices. Mal hecha, mal rodada, mal
interpretada y al final de todo, te pasa que solo esperas a que el volcán entre
en erupción a ver si todos mueren de una santa vez, y te das cuenta que el
presupuesto se ha gastado íntegramente en los efectos especiales, salvo un diez
por ciento que tuvieron que invertir en Kiefer
Sutherland.
Voy a tratar de contar la historia del personaje principal, "El Celta". Así, sin más. Pero es
que el protagonista es un batiburrillo de diferentes caracteres que han asomado
a las películas durante años, así que no lo voy a llamar nunca "El Celta", que me suena raro. De
esta manera, lo iré nombrando según la película a la que estén copiando o en su
defecto como el hijo bastardo de Eddard Stark, Jon Nieve, ya que Kit Harrington, actor intérprete de
limitadas cualidades, pone en esta película las mismas caras que cuando está
más allá del muro en "Juego de
tronos".
Empieza la película en Cimmeria el norte de Bretaña, dónde unos
malévolos invasores matan a la familia de Conan cuando éste es infante. En una
escena rodada con mucha menos clase que aquella en la que Nadiuska, madre de Conan, moría a manos de la voz de Darth Vader,
un Kiefer Sutherland, que parece
estar contando su sueldo durante todo el metraje, y sus hombres, pasan a
cuchillo a la madre del nuevo Conan. En lugar de llevarse al Cimmerio, le dan
por muerto y éste huye hasta ser apresado por unos esclavistas.
En la siguiente escena observamos como el fibroso pero no híper-musculado
Conan, se transmuta en el Hispano de "Gladiator"
y acaba con cuatro gladiadores en un decir Jesús. La lucha, horriblemente
rodada, tiene lugar en un recinto de tercera división de cuatro metros de largo
por dos de ancho, y los gladiadores malos en lugar de ir a saco, esperan a que
su predecesor atacante muera para enfrentarse ellos al Hispano, que los derrota
como quien lava y se pira vacilando al personal.
El que maneja el tema de los gladiadores de tercera, decide que es hora de
invertir y se lleva a sus esclavos caminito de Pompeya. Es llamativo ver como
Jon Nieve es claramente el más chiquitito en una caravana formada por
hipertrofiados musculosos y vigoréxicos adictos al gimnasio. La visión de la
caravana de presos nos informa que, históricamente, los esclavistas han
alimentado a sus muchachos con batidos de proteínas, claras de huevo y
alimentos bajos en grasas. Por el camino se topan con una especie de carroza
tirada por dos caballos que sufre un accidente. Uno de los caballos queda
malherido y el pequeño Jon Nieve que acaba de destripar a tres tíos sin mirar
atrás, siente lástima. Pide sacrificar al caballo para evitar sufrimiento, insulta
al capataz, que con mano blanda le cruza la cara, y al final observa como la
damisela que sale de la carroza le pide su ayuda. La chica en cuestión es la
actriz protagonista de "Sucker
Punch" y, como luego veremos, es hija de la pareja formada por Trinity
(Matrix) y el Profesor Moriarty (Sherlock Holmes 2), pero no ha heredado
nada decente y es una agonías que se pasa la película con cara de frío, hambre
y pena. Llama al Hispano que acude a sacrificar al caballo. En ese momento
Conan vuelve a meterse en la película de manera que el muchacho es capaz de
partirle el cuello a un caballo con un giro de muñeca. En este momento de la
película me puedo imaginar a clásicos rompedores de cuellos como Steven Seagal partiéndose el ojete.
La chica se queda prendada de Conan por su fuerza obviando que a su lado
hay unos mazas que podrían haber practicado la eutanasia equina golpeando con
el pectoral en el costado del animal. Pero para gustos hay colores. Una vez en
Pompeya, el Hispano encuentra al amigo negro que al igual que en "Gladiator" le curará, más
adelante, sus heridas y, de nuevo, al igual que en la película de Ridley Scott hay un tipo (El primo
cutre de Khal Drogo) que ansía patearle el culo al Hispano (sin éxito, todo sea
dicho). El gladiador negro y el Hispano se hacen muy coleguitas pese a tener
que matarse en una lucha que tendrá lugar para solaz y alegría del malvado Donald Kiefer Sutherland, que pasaba por allí a tirarle los tejos a la
chica con cara de frío. A todo esto, resulta que Trinity y Moriarty son dos
politicuchos con menos espíritu que una vela y que morirán de forma cutre
salchichera sin que a nadie, ni a su hija, le importe.
Porque el amor paterno parece desaparecer cuando las hormonas estallan. La
chica tiene un caballo que se llama igual que las bandejas de mi horno. Pyrex,
el caballo, se desboca como "El potro
de Vallecas" cuando la tierra tiembla (aunque todos dicen que eso es
normal y nadie se asusta, los caballos son muy suyos). Llaman al hombre que
susurraba a los caballos que doma a la bestia indómita utilizando el truco de Cocodrilo Dundee (conocido en mi casa
como "Cocodrilo el Dandi")
para dormir a los bueyes. La moza y Cocodrilo Dundee se dan a la fuga olvidando
ella a su familia y él su venganza, pero a medio camino las hormonas bajan y
deciden volver porque si no lo hacen se acaba la película y no hemos visto el
puñetero volcán.
Llegado el momento final, en el circo de Pompeya que tiene más aluminosis
que Maracaná, encadenan a los gladiadores a una roca de la marca "Kinder sorpresa" y pasan a hacerles
mil judiadas. Les tiran unas lanzas que se clavan en la roca para sorpresa del
público y a continuación comprobamos, en mitad del fragor de la batalla entre
gladiadores malos y buenos, que la base de la roca es de ¿madera? ¿corcho?
¿corchopán? mientras que la parte de arriba es de piedra berroqueña. De esa manera
se explica que las lanzas se claven en la base y la parte de arriba aplaste enemigos
con suma eficacia. He de resaltar que las peleas a espada son entre malas y
deleznables pero cuando todo está a punto de caramelo explota el volcán y ves
que todo el cutrerío se explica en que se han gastado dinero (cien milloncetes)
haciendo una película de Roland Emmerich.
Olas gigantes, lava que cae como si fueran misiles, terremotos. La de Dios.
Gente corriendo para todas partes y un Cristo de mucho cuidado. Lo cual es raro
si tenemos en cuenta que en Pompeya encontraron a gente petrificada sentada, haciendo
bebés, perros encadenados, otros recogiendo sus joyas y dinero (ése sería
pariente lejano mío) o incluso a los Gladiadores encerrados en el anfiteatro.
Pero no pasa nada, que para eso es una película. Aquí la gente huye en
cualquier dirección, que digo yo, si el volcán está para un lado, lo suyo es
correr para el otro.
Jon Nieve y su nueva novia a la que rescata poniendo en peligro su físico
pese a haber pasado un total de seis minutos de su vida con ella, escapan,
abandonan al amigo negro, que por cierto era un armario ropero de cuidado pero
muere en una lucha con un romano de pelo ensortijado, flaco y torpe con la
espada, y a las puertas de Pompeya quedan hechos cenizas mientras se dan el
primer y último beso.
Coño, qué película más mala. A todo esto el hijo de Donald Sutherland, que no ha heredado de su madre ni las
mitocondrias, muere y a nadie le importa. Por la tarde me iba a ir a ver Spider-man 2, pero no sé si el hígado
me soportará tanto. En resumen. Me había valido más ver al Sporting, que ya es
decir.
Escena que no es así ni por el forro |
Qué equipazo de PAISANOS |
Este Paul Anderson es un tío con suerte. A pesar de que esto del cine no es lo suyo y tiene una filmografía compuesta íntegramente por peículas de mierda, los mandamases de los estudios le siguen dando pasta para que perpetre sus atentados contra el cine de evasión. Y encima se zumba a la Jovovich...
ResponderEliminarQue este tío tenga cien millones para hacer una película es de coña marinera. Podría estar liado con quién quieras, desde Monica Bellucci hasta Hugh Jackman que a mí me seguiría llamando la atención que le den un dólar para rodar.
EliminarDigamos que hasta hace poco con un presupuesto ajustado daba un buen acabado a proyectos modestos. Creo que es su única habilidad: hacer que películas basura que podría haberlas producido antaño la entrañable y cutre productora Cannon (la de "Cyborg", "El guerrero americano", "Yo, el halcón" y demás lindezas) luzcan decentemente. Todo apariencia, por supuesto. Lo que no sé como le han dado ese pastizal. Si son 100 millones de dólares de presupuesto seguro que han caído unos cuantos más en publicidad. Incomprensible.
EliminarA lo mejor en unos años sus pelis son un clásico. Yo de chaval era fan del guerrero americano.
EliminarCompruebo en imdb que Michael Dudikoff sigue en activo. Tiene un papel no acreditado en "Objetivo: la Casa Blanca".
EliminarPobre Dudikoff, para lo que hemos quedado. Era un pedazo de actor, jejeje. Recuerdo que en el Guerrero Americano hacía una movida con los dedos para concentrarse, que estuvimos mi padre y yo ahí dale que te pego para imitarle.
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EliminarA mí la Jojovich me parece un callo malayo, o sea que con su pan se la coma.
ResponderEliminarLo que pensaba yo viendo la "afoto" del equipazo de PAISANOS es que salen Ablanedo I y Ablanedo II, y me preguntaba yo... ya no se pone eso de I y II cuando juegan hermanos y tal en el fúmbol o es que ya no juegan hermanos o cómo ye, ho?
A mí la Jovo me parece guapísima, aunque le falta un poco de carne aquí y allá, es cierto.
EliminarRepecto a los títulos de secuelas de hermanos en las camisetas de fúrgol, creo que ya no se estilan. Por ejemplo, los Boateng ponen su apellido sin número, los Álcántara ponen su nombre de pila. En otros deportes, como en pelota mano, sí se pone en la camiseta el número tras el apellido. Y no tiene por qué ser tu hermano, simplemente uno que tenga tu mismo apellido, aunque ya no esté en activo. Por ejemplo, en la pelota mano hay un Berasaluce VIII y un Bengoetxea VI
Ahora se ponen pijotadas como lo de Guti HAZ, que vaya tela. Yo creo que el equipo de la foto todavía le mete un meneo al Sporting de ahora.
EliminarQue gran crítica. Es cierto, de Cimmeria pasa a Gladiator. Y lo de romperle el cuello al caballo con tanta facilidad es de puro chiste!!! Vaya fantasía!
ResponderEliminarNi que fuera un gorrión. Podían haber hecho una escena como la de Conan y el camello, jeje
EliminarTu reseña confirma lo que no uno ve de lejos aunque no me gusta opinar sin verla...qué coño! Este Anderson sino varía su filmografía llegará dentro de poco a cotas Uwe Boll pero Emmerich es mucho más grande y le profeso mucho cariño (Stargate, Independence Day, Patriota...). Me extraña que no esté la Jovovich en el reparto, eso es que hay crisis.
ResponderEliminarEsa foto del Sporting es muy mítica, grandes épocas futbolísticas donde se llevaba la típica barba cavernícola y no la gomina repeinada de ahora. Lloro. Un saludo Adolfo!
Yo me lo pasé pipa en el cine con Independence day, Stargate y 2012, ahora lo de Godzilla escondiéndose en las alcantarillas de NY no se lo perdono. Ah, la barba cavernícola. Ahora sale uno a jugar así y le llaman hipster.
EliminarYo es que tengo metidos en el mismo saco a Anderson, Emmerich, Bay,Sena, Nispel...todos son mastuerzos que me han hecho renegar del cine de evasión. Todas sus películas- bueno, las que he visto- me parecen basura fílmica, sin excepción. "Stargate" me gustó cuando era un mozalbete, pero no he podido verla entera en los últimos pases por televisión. Tiene aciertos, como el villano y el diseño de producción, pero ese rollo militarista y patriotero norteamericano me da arcadas. Y el tío es alemán... "Godzilla" me parece una de las peores películas de la historia.
EliminarNo creo que vea más películas de estos mendrugos.
Yo creo que Emmerich y Bay tienen algo más de idea que los otros, sobretodo el alemán. A mí la que hizo sobre la vida secreta de Shakespeare me pareció una película digna.
EliminarIgual te gustó por la novedad. Como no redujo a escombros ningún edificio...
EliminarJajajjajajja si no lo hacen se acaba la película y no hemos visto el puñetero volcán, se mamo!!!
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