Estados Unidos
tiene un color especial. Son geniales en aquello que se conoce como “show
business” y marketing. Capaces de convertir el aire en oro y la ausencia de
talento en un triunfo sin paliativos. Por otro lado, es importante asumir que la cara oculta
del éxito continuado es acumular un exceso de confianza. Cuando todo te va
rodado, empiezas a asumir la victoria como parte constituyente de tu ser. Es en
ese momento cuando la cosa empieza a flaquear. Tomemos como ejemplo a la mega-industria
que es Marvel. El flujo de dinero empezó a llegar a tal nivel que
pensaron que cualquier bazofia con el sello de la compañía de Stan Lee
iba a llenar las arcas. Pero no, no está siendo así y ahora la desesperanza
corre por sus venas con cierta facilidad.
![]() |
Kevin Feige, esto es infumable |
Este ejemplo puede
ser transferido a muchas áreas de la vida y la sociedad estadounidense. Ya lo
he relatado alguna vez aquí, pero mi experiencia laboral en Estados Unidos fue
espectacular. Mis años en Buffalo fueron fascinantes puesto que pude combinar una
carga de trabajo manejable con un nivel de vida excelente. En otras palabras,
nunca trabajé menos para tener más. Es cierto que en Nueva York tuve más
problemas, pero estos ya se derivaron de la presencia de un inglés y una turca
de los que mejor no hablar por la mera razón de que no quiero convertir este
blog en un nido de palabras malsonantes e insultos que harían sonrojar a la
cabra de la legión. En mi modesta opinión, Estados Unidos, como nación, trabajó
y creció, pero una vez en la cumbre entendió, y es lógico, que no había que
seguir pedaleando. Sólo hacía falta dejarse llevar.
![]() |
Dejarse llevar puede poner al mando a Sloth el de los Goonies |
Y es por ello por
lo que se encuentran en la tesitura actual. Elecciones en unos meses y ¿qué es
lo que tienen para elegir? En primer lugar, está Joe Biden. Senil, ido,
equivocado. Ha apoyado ciegamente la masacre cometida contra el pueblo de Gaza
para, al darse cuenta del flujo de votos perdidos, reaccionar levemente sin llegar a convencerse de que está en el lado incorrecto de la historia. De puro tibio se ha quedado helado y mentalmente
bloqueado. Enredado en historias de caníbales y justificando el retiro de un
uno por ciento del armamento entregado a Israel, Joe se ha quedado en
tierra de nadie, perdido y en el lodo. Tiene tantas opciones de ganar las
elecciones como el Sporting de subir a primera.
Los que se comieron al tito de Joe |
Luego está Donaldinho Trump. El hombre naranja tiene una ventaja y es que el menor de sus crímenes es su constante apoyo a Netanyahu. Los republicanos tienen como joya de su corona a un señor que se encuentra en mitad de un juicio donde una estrella del porno le acusa de coaccionarla para tener sexo y posteriormente pagar por su silencio de manera que el escándalo no estallara en plenas elecciones. En un continuo gotear de noticias grotescas, se nos ha contado como Donald siente una cierta lujuria por su propia hija o como parece ser que le gusta que le azoten con una revista que lo tenga a él en portada. Las continuas transgresiones morales, personales, económicas y vitales del dirigente republicano no sólo no han acabado con sus esperanzas políticas, sino que lo han colocado como el candidato número uno de cara a ganar las próximas elecciones, constatando que algo no va bien en la sociedad americana. No es caso menor, porque es caso mayor, pero estamos hablando de un tipo que tiene su propia colección de cromos, vende biblias, se codeó con Epstein (a partir de cierto estatus de depravación, todo el mundo se codeaba con Epstein), y pidió sin cortapisas que acogotaran a Mike Pence, una idea a la que, si se le da una vuelta, igual tampoco era tan descabellada. Ese es el futuro.
![]() |
Estados Unidos en 1798. ¿Qué? ¿2021? Bueno, eso. |
Por los laterales de esta historia aparecen dos nombres que permiten entender que no hay límites para la locura política en los USA. Por un lado, RFK, o Robert Kennedy Jr. Un tipo que acaba de comentar que un gusano devorador de carne se llevó parte de su cerebro. En cierta medida, RFK es el claro ejemplo de que aquel anuncio de “Di no a las drogas” de mi niñez tenía razón. RFK, heroinómano conocido, dijo no a la vacuna del COVID porque picarse en vena está bien pero sólo si el jaco te lo pasa alguien de confianza y no esas oscuras corporaciones de las que no puedes fiarte. Es afortunado que este filofascista sea tan abiertamente estúpido e incoherente que genere cierto rechazo. También es un Kennedy de extrema derecha, algo que no está muy bien visto desde la propia extrema derecha ni desde el propio clan de los Kennedy, pero sigue siendo increíble que tipos así sean capaces de tener voz, voto y poder. Dice muy poco de lo que puede haber de ahí para abajo.
Porque para caer
para el lado derecho del espectro político en el que se incluyen todos y cada
uno de los políticos de los que he hablado y hablaré en este texto, sólo hace
falta una mezcla de poca catadura moral, poca cordura y escasa inteligencia. Yo
era de los que creían que estos piratas abusaban del ignorante para traerlo a
su porqueriza particular y ahí encargarse del incauto que le entregaba su voto
y su apoyo. Pero me equivocaba. Ahora el paleto de Arkansas, el inculto de
Missouri o la ceporra de Connecticut tienen la puerta abierta y la escalera
lista para subir en el escalafón político. No voy a hablar de Marjorie Taylor-Greene,
una muchacha que contaba no sé qué de unos rayos láser judíos que venían del
espacio amén de algunas chorradas de mucho nivel sobre pandemias, homosexuales,
el 11S y similares. Lo que toda la vida se llamó una iletrada, ahora ostenta el
poder. Pero, como digo, no voy a hablar de ella porque la última gran diva de
la política americana es Kristi Noem. Kristi pensaba en ser la
vicepresidenta de Trump. Sus credenciales son tener cara de comprar el
Botox por galones y esa mirada de quién no ha tenido una idea lógica cruzándole
por la cabeza en su vida. Dice Kristi,
en sus memorias, que su cachorro de perrete de catorce meses era difícil de
controlar, así que un día, se subió a su coche y descubrió que el joven animal
era un ser feliz comportándose como un cachorro. Condujo hasta un sitio
apartado, cogió su pistola y le metió un tiro entre los ojos al perro. Cuando
volvía al vehículo pensó que también había una cabra en la granja familiar que
olía así como a choto, como a cerrao, como a cabra, propiamente. La metió en el
coche, se la llevó al mismo sitio donde su mascota estaba aún caliente y le
pegó un tiro a la cabra porque esta gente de derechas tiene esta fijación con
enterrar a sus enemigos juntos en lugares anónimos. Esta es una historia
contada por ella misma para hacerse ver como una posible candidata a la
vicepresidencia. Échale huevos. Luego también habla de como le paró los pies a Kim
Jong Un en un encuentro político que tuvo con el oriental que se peina con
una cacerola vieja. Kristi fue capaz de poner en su sitio al monstruo,
algo que logró hacer pese a nunca haberse encontrado personalmente con el
dictador norcoreano. Una vez pillada en la mentira, Kristi no parece
saber recular. No le hace falta. En una reciente entrevista, la maquinaria de
derechas ya encontró un nuevo objetivo sugiriendo que la editora del libro es
una peligrosa comunista. Lo que es seguro es que el camino a la casa blanca de Kristi
ha llegado a su fin. Algo que el perro de los Biden seguro que está
celebrando con alegría.
![]() |
Kristi Noem. Menos neuronas que un ladrillo |
Ese es el nivel y
es terrorífico. En España nos quejamos, pero vean por donde van los tiros.
Imaginen que mañana pillan a Sánchez cometiendo actos impúdicos con una
vedette del Molino. Para escapar dicho ataque, observen como el Perro
empieza a sacar una colección Panini con cromos del susodicho Sánchez
disfrazado de bajista de los Mojinos Escozíos. Imaginen la reacción del
populacho. Sería un disparate absoluto. Tendríamos elecciones dos días después.
Supongan también que el jefe de la oposición, el señor Feijóo, tiene que
renegar de un pasado cercano a las drogas mientras habla de un gusano
carnívoro, Abascal saca a relucir que no le importaría usar su fusil con
lo que tenga a su vera y Ayuso se dedicase a inventarse teorías
conspiranoicas sobre pandemias y ataques a campos de trigo con rayos láser. Es
difícil de imaginar. Inimaginable. ¿Lo es? ¿Se lo imaginan? Ya, yo también
¿Cómo creen que afectaría dicho comportamiento a sus votantes? ¿Se rebelarían?
¿Tomarían cartas en el asunto? Ya, igual que en Estados Unidos. Claro, lo
entiendo. A ver si… No me atrevo a decirlo. Vale, ya ¿A ver si el problema de
los gobiernos de derechas va a estar más en los votantes que en los políticos?
¿Se lo imaginan? Ya, yo también. Es jodido pensar que hay ochenta millones de
personas dispuesta a votar a un estafador con comportamientos propios de un
sifilítico, apoyado por una homófoba semianalfabeta y una chica que se jacta de
sacrificar animales domésticos por diversión.
![]() |
Maraviglioso |
Sí, el problema no
va a ser la casta política. Ya lo voy pillando.
Me gusta leerte, porque tus publicaciones son muy interesantes e ingeniosas. Pero cuando te metes en temas políticos, está claro que siempre tienes fijación por la derecha (o la ultraderecha), cuando en España el problema es la izquierda (o la ultraizquierda). Es precisamente la izquierda (o la ultraizquierda) la que ha manifestado tener peor catadura moral en los últimos años, defendiendo lo contrario de lo que le vendió al pueblo que le votó y, que por desgracia, le seguirá votando. Es una pena que tus artículos sean tan tendenciosos... en fin. De todas formas, un saludo.
ResponderEliminarHola Alex y muchas gracias por tu comentario. Me alegra ver una postura tan respetuosa y educada en un tema en el que la polarización puede llevar a la pérdida de las formas.
EliminarEs cierto que mi texto es tendencioso. No trato de ocultar mi ideología ni pretendo que lo hagan aquellos que piensan de forma totalmente opuesta.
En lo personal, llevo viviendo en países con gobiernos de derechas desde 2011 y he observado el impacto tremendamente negativo de algunas de esas políticas. Sin embargo, este texto no pretende analizar nada más que la falta de liderazgo de la política estadounidense, lo ridículo de alguno de sus portavoces tanto desde lo político como desde lo mediático y como esta falta de una clase política digna puede correlacionarse con un pueblo que tiene exactamente lo que pide como representantes. Me niego a creer que no hay nadie mejor que Biden, Trump o RFK.
Gracias por pasarte y comentar en un texto con el que no estás de acuerdo. Me parece muy sano leer y escuchar opiniones ajenas. Yo soy de los que escuchaba (ahora no tanto) a Losantos y lee El Mundo a diario.
Un saludo.
Buenas, Adolfo. Buf, cómo está el patio. Al final no va a hacer falta un meteorito para extinguirnos. Hablando de futuro distópico, ayer vi "Furiosa" en el cine, de esas pelis que hay que ver en pantalla grande, como la anterior. La verdad es que no mejora a "Fury road" y todo lo bueno suena a ya visto en aquella, pero merece la pena verla en cine. Más ahora que viene el verano con la habitual seguía cinematográfica de estrenos disfrutables si tienes más de doce años.
ResponderEliminarDon Iker,
EliminarCada día tengo más claro que Idiocracia era un documental. Mira a mi Prime Minister, que no levanta metro cincuenta y quiere volver a poner la mili obligatoria. Es como Abascal, que no agarró el CETME pero se viene arriba pensando en la legión.
Hoy voy a ver Furiosa. Es fiesta en los UK y ya toca disfrutar de una buena peli. Llevo una racha de buenos ratos en el cine. Tanto Civil War, como Abigail, como Fall Guy me dieron lo que iba a buscar y con Furiosa espero mucha marcha. No en vano, Fury Road es una de las pocas pelis que vi dos veces en pantalla grande.
Saludos.
"Fall guy", por aquí "El especialista", no me acabó de convencer, daba vueltas y vueltas sobre lo mismo, aunque tenía varios momentos con gracia. Con "Furiosa" tendrás marcha, tanto de imagen y sonido; es de ver en cine de todas, todas. Por mucha tele a la última que se tenga, como el cine no hay para películas de este tipo.
EliminarFall Guy es una peli entretenida, de pocas pretensiones. Un poco como Bullet Train. Digestión rápida y a casa. Mientras den lo que dicen que van a dar, a mí me vale. Prefiero eso a las falsas pretensiones artísticas de algunas películas o la idea de vender un mensaje en una peli de Rambo (y no incluyo Acorralado que es una cosa que es otra cosa).
EliminarMe gustó Furiosa. No tanto como Fury Road. Es increíble que el señor Miller roce los 80 y pueda hacer esto y yo tenga que irme a mimir a las 9 30 porque no puedo con el alma. Bien trabajada y entretenida. Dementus se me hizo un poco la versión de Chris Hensworth del Joker de Ledger. Algunos gestos, frases, escenas... se me hizo familiar, vamos.
El lunes vi además la última de Statham, un truño como un puño. También vi estos días "La Plaga", terror francés con un montón de arañas. Me pareció simple pero muy bien hecha. Echo de menos más pelis de cocodrilos o tiburones. El verano me pide bichos, pero bien hechos.
Si primero digo lo del Joker... https://www.ign.com/articles/how-dementus-became-mad-max-joker-furiosa
EliminarUn villano un poco tontaco, no te explicas cómo todos esos moteros le siguen. Aunque luego ves a Trump y ves que es posible. Graciosa esa especie de cuádriga que lleva con motos en lugar de caballos.
EliminarYo seguiría a cualquier tipo capaz de ir en cuádriga. Es una regla que tengo y que me ha llevado hasta donde estoy hoy en día.
EliminarA mí me chirría la escapada de Furiosa con medio brazo, en moto y sin que ninguno de los que da vueltas alrededor se entere. Pero me da igual, yo al cine no voy a pensar.
Ya verás que bien nos queda el mundo cuando Donald suba al trono en Noviembre. Tenía razón Arrabal cuando decía que el milenarismo y el apocalipsis iban a llegar. Los borrachos nunca mienten.
Buf...un segundo mandato de ese tipejo sin escrúpulos ya le da la puntilla al planeta.
EliminarEl guión de "Furiosa" tiene más agujeros que un colador. O eso o faltan un porrón de escenas para explicar muchas cosas, se está dando un buen batacazo en taquilla, por lo que lo más seguro es que Miller no pueda dirigir la siguiente con 89 años. Lástima.