THE BATMAN (2022)

Sensaciones encontradas me deja este Batman de Matt Reeves, excelente director pero que creo que se ha pasado ligeramente de frenada en su visión del hombre murciélago.

Visualmente excepcional

Es cierto que el director ha tratado de apartarse de la mera acción que suele rodear a las películas del género de las mallas y las capas. En esta película, Batman es un detective, no muy bueno, pero que invierte más tiempo en investigar conexiones y tramas que en repartir leña. Lo cual está bien. Es algo nuevo. Nolan lo intentó brevemente en algún momento de su trilogía, pero siendo Nolan, al final se enredó en una maraña de conceptos tecnológicos y apartó la lupa y la pipa de Holmes por una visión más elevada del gran hermano controlado por Wayne y Lucius Fox.

La gran idea de Batman es que un septagenario controle 800 pantallas a la vez

El mayor problema de esta película de hoy es lo que, hasta ahora, había sido la mayor virtud de Batman. Sus enemigos. No es fácil adaptar al Acertijo de manera que pueda ser tomado en serio. Es por ello que Reeves y su guionista deciden cambiar algunos conceptos y enredar con el origen de Ed Nashton. El ahora enmascarado sigue unido al verde, los acertijos y el conocimiento, pero esta vez es la venganza lo que le inspira. Y pese lo acertado de la propuesta de partida y el gran trabajo de Paul Dano para dotar de personalidad al hombre bajo la máscara, la trama se embrolla de manera inverosímil y deja al bueno de Enigma en mitad de ninguna parte.

Es cierto que Enigma ha tenido momentos más bajos

Porque, de alguna manera, todo en Gotham acaba girando en torno a Wayne, tenga o no necesidad de hacerlo. Y en este caso, no había gran necesidad de emparejar a bueno y malo en un duelo de sufridores huerfanitos. Ed Nashton trata de destruir la corrupción y el crimen de Gotham encargándose de sus principales responsables. Es una buena motivación. Además, falto de punch físico, el Acertijo acabará aprovechando la existencia de un peón de orejas puntiagudas para acabar con el mayor problema de Gotham, un Carmine Falcone excepcionalmente adaptado desde las viñetas. Todo bien hasta que el Riddler es desenmascarado y se nos muestra como un llorón ajeno a todo tipo de personalidad. Un personaje que, o mucho cambia la cosa, será incapaz de poner en aprietos a un Batman más maduro. Me extraña esta aproximación al personaje puesto que del Planeta de los Simios de Reeves salió uno de los mejores villanos de los últimos años. Ese Koba de ojos inyectados en odio y maneras de asesino en serie. Ese monstruo era lo que pide este Batman.

Esto es un villano. Punto. 

Y es que, pese a la gran ambientación, la espectacular dirección, ese Batmóvil salvaje que da la mejor escena de la película en una persecución de quitar el hipo y la presencia de villanos como Falcone o Cobblepot, la película se alarga más de la cuenta y nunca hay sensación de que el hombre murciélago vaya a fracasar. En el bando del bien, Selina Kyle y Gordon lucen por momentos, aunque el futuro comisario parece dirigir aquel Scotland Yard de los dibujos animados de Sherlock Holmes, donde todos los agentes corrían en la misma dirección aullando al viento e incapaces de alcanzar al malvado Moriarty.

"Ya te cogeré, Moriarty" (léase con voz supranasal)

Muy larga, larguísima para lo que cuenta. Con buenas ideas. Muchas buenas ideas. Ese Batman imponente, esa ciudad llena de supersticiosos y cobardes criminales. Ese Falcone con las gafas de su hijo Alberto. Ese homenaje a Miller y Moore como abogados. Escenas muy solventes seguidas de largos minutos de nada. Quizá es que me esperaba mucho de ella. Siendo gran fan de Batman y de los monetes de Reeves, el listón estaba muy alto y la película me ha defraudado un poco. Mención aparte tiene ese cameo final del criminal más conocido de Gotham cuya risa no hace presagiar nada bueno en casi ningún sentido. No tiene razón alguna de estar ahí. Si la idea era apartar a Batman de lo ya visto, traer de vuelta al príncipe payaso del crimen no viene a cuento.

El mejor personaje, para mí, de largo

No es una mala película, y por momentos pensé que estaba ante el mejor Batman jamás rodado. Luego todo fue cayendo en picado mientras asistía a unos acertijos sin gracia y a unos diálogos sin personalidad ni interés. Quiere ser Se7en por momentos, pero solo hay un Se7en y las genialidades son difíciles de replicar, así que en su tramo final vuelve a los lugares comunes, pero a algunos personajes les falta el peso necesario para sugerir que Batman pueda perder. No hay tensión, o al menos no la suficiente. Y eso era lo que nos habían prometido.

Ya no se hacen como antes