Cada vez resulta más complicado sacar un
minuto para dedicárselo a este blog que tantos ratos me ha entretenido. Así que
el otro día me senté en medio de una encrucijada ¿Cierro el blog o lo mantengo
andando despacito? La solución vino sola. Como asiduo de la página Whatculture.com que soy, encontré en ella el cáliz
dorado que me permitiría, poco a poco, y con unos mínimos (pero mínimos
mínimos) estándares de calidad, mantener el proyecto a flote. La solución que
esta página me dio era evidente. Se trata de un recurso ampliamente utilizado en
este blog, pero a la vez corregido y aumentado.
La solución es hacer listas gigantescas de
cosas que me interesen y que, a lo mejor, puedan llamar la atención de alguien.
Y ¿por dónde empezar? Pues si han leído ustedes el título (¿Hay alguien ahí?),
fácil es saberlo. Las cincuenta películas más pachangueras, o lo que es lo
mismo, mis películas favoritas.
Porque el cine es muy grande, y con lo grande
que es, hay espacio para todo. Grandes películas, obras menores, intérpretes
consagrados y géneros muy diferentes. Sin embargo, en un blog que, por edad del
autor, tiende peligrosamente hacia el abismo de lo nostálgicamente incorrecto,
en esta lista no solo va a tener cabida la calidad artística de las obras en
cuestión, sino el componente personal y privado.
Y como hasta el más burro de los burros llega
a aprender por dónde sigue el camino, al contrario que en mi última lista de
tonterías, esta vez, el papel piojoso, andrajoso y zarrapastroso que me marca el
itinerario a seguir, ha sido convenientemente escaneado y no existe espacio
para el error salvo hecatombe apocalíptica que conlleve el fin de la red de
redes. Si eso ocurre, ha sido un placer. El que sepa hacer fuego con dos
piedras y mucha paciencia que se ponga en contacto conmigo. Porque sepan
ustedes que el día que internet caiga, este mundo habrá tocado a su fin.
Así que mientras llega el fin de los días,
perdamos el tiempo con los primeros números de la lista. Del 50 al 1. Empezamos
con…
50. CRITTERS de
Stephen Herek (1986)
No es que Herek
haya hecho muchas películas, pero tampoco es que sea un mal director. Debuta
con esta película de serie B/Z. Una de tantas que salieron a rebufo de los
adorables Gremlins. Sin embargo Critters va un poco más allá en cuanto
a violencia y sadismo. Los muñecos ya no tienen un lado adorable. De hecho, por
un lado tienen dientes y por el otro pinchan. Una monada. Un buen amigo de mi
padre tuvo a bien hacernos lo que en aquellos locos 80s/90s era la cúspide del
pirateo. Alquiló la película y utilizando dos vídeos y una pantalla ya teníamos
Critters sin pagar. Ni que decir que
mi padre le había pedido los Gremlins.
Aquello fue un error subsanable y sin importancia dado el divertimento que
aquellos muñecos azules trajeron a mi casa un oscuro fin de semana asturiano.
No es una gran película, pero sin embargo entra en esa categoría de “Si la echan por la tele, me la veo”.
49. COCODRILO
DUNDEE de Peter Faiman (1986)
Un gran año el 86 en lo que a cine se
refiere. Alguien dirá “Ese año se
estrenaron Aliens, Platoon, Top Gun, Cobra o Cruce de Caminos y ¿usted destaca
estas dos películas?” Lo primero: No me trate de usted que soy muy joven.
Lo segundo sería comentar que Cruce de
Caminos es una película inmensa. Merecedora de estar en la lista (Spoiler:
no lo está. Fin del spoiler). Lo tercero y último: Cocodrilo Dundee es un peliculón. La trama es similar a la de
aquellas películas en las que Paco
Martínez Soria interpretaba a un hombre ataviado con boina de rosca y
actitud pueblerina que llegaba a la gran ciudad. Cocodrilo Dundee es lo mismo. O mejor dicho, sería lo mismo si Paco Martínez Soria se trajese en el
cinturón un cuchillo de Albacete de proporciones ciclópeas y gargantuescas. Cocodrilo Dundee, o “Cocodrilo el Dandy” según mi madre, es
una película entretenida, dinámica y con un actor (El Clint Eastwood de las antípodas le llamaban a Paul Hogan) rebosante de carisma.
48. EL PRÍNCIPE DE
ZAMUNDA de John Landis (1988)
De cuando Eddie
Murphy era el indiscutible Dios de la comedia o al menos le discutía el
trono a Steve Martin. El príncipe de Zamunda es una película divertidísima.
Plagada de momentos icónicos y de escenas ridículas. Por la pantalla
transitaban, en sucesión de situaciones hilarantes, los diferentes personajes
interpretados por Arsenio Hall, icono
de la televisión americana en épocas pretéritas, y el gran Murphy. No sé dónde está ya aquel genio del monólogo políticamente
incorrecto que, embutido en cuero de colores bizarros, era capaz de burlarse de
la ceguera de Stevie Wonder, de los
italoamericanos embrutecidos tras ver a Rocky Balboa, y de sí mismo, con un
sentido del humor absolutamente rompedor. En El príncipe de Zamunda todo es más sencillo. Humor blanco, que se
dice. Pero pocas escenas de la historia de la comedia cinematográfica son tan
magníficas como la actuación de Randy Watson y Chocolate sexy. Pónganla en youtube y disfruten de
ese tema excepcional que dice aquello de “Creo
que el futuro es de los niños, mostradles el camino….”. Luego intenten no
canturrearlo con una sonrisa mientras van en el coche. Ya advierto que es
imposible “Hace años decidiiiiiiiiiiiií…”
47. EL EJÉRCITO DE
LAS TINIEBLAS de Sam Raimi (1992)
De alguna manera, al ver la portada y cateto
como era yo a mis trece años (¿quién no lo ha sido?), pensé que El ejército de las tinieblas era una especie
de versión apócrifa de Conan. No me
pregunten la razón. En su lugar encontré una de las comedias más divertidas que
me he echado a la cara. Impregnada de ese estilo Raimi de los primeros años, tan bizarro y repleto de giros
imposibles, de tomas enloquecidas y con ese Bruce
Campbell majestuoso capaz de soportar por sí solo, y entre mueca y mueca,
el peso de una película que alcanza cotas de grandeza en los momentos más
ridículos. Luego llegarían otros placeres culpables del mismo director como Rápida y Mortal o Darkman, verdaderos peliculones que tampoco están en la lista, todo
hay que decirlo. La próxima la hago con doscientas películas, al paso que voy.
46. REGRESO AL
FUTURO de Robert Zemeckis (1985)
No ponerla sería un delito de lesa majestad.
Ponerla tan abajo prácticamente lo es. Regreso
al futuro tiene un aroma a Navidad, a familia, a vacaciones, a domingo por
la tarde, a felicidad. Es un clásico y el que lo niegue miente como una
bellaca. Es una película redonda por actores, trama, ambientación, dirección y sobre
todo por la capacidad de entretener con una premisa tan sencilla, y a la vez
tan compleja, como es la existencia de un DeLorean capaz de transportarte en el
tiempo. No creo que exista nadie en la faz de la tierra que sea incapaz de
disfrutar de esta pequeña joya. Esta película es la fiel demostración que
existen los viajes en el tiempo. Sentarse a verla significa no apartar la
mirada de la pantalla durante dos horas que pasan como dos minutos.
Con eso acabamos por hoy. En otro rato
seguimos hasta la posición 41. En la siguiente tanda abandono (momentáneamente)
esa etapa dorada del cine que fueron los finales de los 80/principios de los
90.
Y dado que no va a haber espacio en la lista para todo y cada día voy a encontrar alguna película que merecería ir en ella, hoy el premio de consolación es para:
CRUCE DE CAMINOS de Walter Hill (1986)
"Cruce de caminos", con Karate kid haciendo punteos con la guitarra eléctrica. Impagable.
ResponderEliminarY con Walter Hill detrás de la cámara, que no es cosa baladí.
EliminarSi un día me caso, quiero lidere la ceremonia el Reverendo Brown XD.
ResponderEliminarNo cierres el blog amigo, tu sabiduría siempre es una buena fuente de información. Escribe cuando puedas (mantenlo despacito); a nuestras edades todo el mundo sabe que es difícil y más cuando llegue la hora del tema vástagos.
Veo que empiezas fuerte este listado, será difícil llegar al número 1 aunque me temo que en las primeras posiciones habrá una (o dos) del señor McTiernan y otra del señor Eastwood sobre el Oeste ;). A la espera me hallo. Un abrazo
El próximo comentario que me hagas a ver si no me metes tantos Spoilers copón, porque lo has clavado. Si el reverendo Brown te casa, cuidado con la actuación de Chocolate Sexy, que puede provocar desmayos entre el público menos amante del arte. Gracias por el primer párrafo, que casi que me emociono y todo.
EliminarJajaja... es que antes de venir aquí, me he ido a unas entradas tuyas sobre "Finalones de cine" y te he calado.
EliminarEdu tiene razón, la desaparición de este blog dejaría un hueco difícil de llenar en el blogerío. Tú a tu ritmo, Adolfo.
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